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Con más de 65 años, el Auditorio Nacional es parte de nuestra historia moderna como mexicanos; de nuestro acervo cultural y un ícono visual para los visitantes de la Avenida Reforma en la zona de Polanco.
El patronato de este recinto trae bajo la manga la remodelación de algunas de sus áreas públicas. Dentro de este proyecto, recientemente han inaugurado Zona Áurea, un bar ubicado debajo de la escalera monumental derecha.
Su propósito es enriquecer la experiencia del visitante del Auditorio Nacional, que antes del espectáculo que irá a ver, pueda tomar un aperitivo y degustar alguna opción del menú, al igual que en los mejores recintos de entretenimiento del mundo. Esto, sin duda, promete mayor valor para los asistentes.
El lugar destaca por su diseño, a cargo de Héctor Esrawe, quien ha hecho un gran trabajo con el uso del plafón, recubierto con piezas artesanales con acabados en esmalte color cobre. Y siguiendo esa gama, tomó como elemento principal el latón para cubrir la barra y la contrabarra. Esto, sumado el diseño de iluminación genera un ambiente armónico, sofisticado y acogedor.
Cuenta con una terraza que permite fumar y disfrutar el lugar desde otro ángulo. Llama la atención el mobiliario, que tiene líneas muy geométricas que remiten al art Decó y al diseño estilizado de Frank Lloyd Wright. La vegetación también es parte importante para completar la atmósfera del bar.
Su ubicación estratégica permite ser un lugar de encuentro entre amigos y familiares. Ahora los asistentes pueden llegar con mayor anticipación. Es un espacio para desestresarse después de un día caótico en el tráfico de la ciudad, donde –como preámbulo al show que están por ver— podrán relajarse. Una vez finalizado el evento, también podrán extender su exp
eriencia mientras esperan a que se descongestionen las vías de salida.
Zona Áurea está operado por Loop Tonic, un grupo mexicano dedicado a la hospitalidad y entretenimiento que opera restaurantes y bares con diferentes conceptos en la ciudad, y con experiencia en servicio de catering en eventos masivos tales como conciertos y festivales.
El menú de bebidas ofrece desde destilados y cerveza de barril hasta coctelería de autor. Cabe mencionar que los bartenders están muy capacitados y constantemente están participando en concursos de mixología. Vale la pena poner a prueba su talento pidiendo un coctel Mixologist Choice, indicando solo el tipo de destilado y sabor que se prefiere y ver qué coctel generan al momento para satisfacer el gusto del cliente.
En cuanto a la oferta de snacks, hay opciones para todos los gustos. Recomiendo la tabla de charcuterie, que trae jamón serrano, chorizo de pamplona, lomo embuchado, salchichón, aceitunas y crotones con aceite de ajo; el wrap de roast beef, cuyo sabor armoniza con el queso gruyere y cebolla caramelizada y remata con un toque fresco de la arúgula. El wrap de vegetales al grill es una buena opción vegetariana; y para compartir, nada mejor que los nachos preparados con frijoles refritos, chilli con carne, crema, queso y jalapeños hechos en casa, para no quedarse con hambre.
Zona Áurea abre los días que hay concierto en el Auditorio Nacional, dos horas antes del inicio del espectáculo y cierra sus puertas a las 24:00 horas. Para quienes desean vivir esta experiencia sin necesariamente contar con boletos para un concierto, deberán reservar vía correo electrónico o por teléfono.
Paseo de la Reforma 50.
Miguel Hidalgo, 11580, Ciudad de México
Tel. 9138-9796.
IG: zona.aurea